Distopía

Desaparece, sal de la frontera,

lo normal te busca para esclavizarte,

eres como un error;

pero tienes escapatoria,

incluso afuera existe el sentido,

es más, nace el sentido.

Aquí estás enjaulado,

y todo está por debajo

mientras subes escalón a escalón,
apisonando todo lo habido,
y matando las semillas de lo que habrá,

¡huye!, ¡vete!.

Si sufres desde mi posición este no es tu lugar,

y es una bendición,

eres capaz de observar desde la órbita;

la felicidad ajena incomprendida,

la propia, el dolor, el amor,

y no preguntarás:

¿por qué sonríen?.

En mi lugar es difícil preocuparte,

y no conoces el porqué,

quieres y no puedes;

si pudiera obtener la visión,

¡esa perspectiva!.

La gente está bien,

pero tú puedes negar eso,

porque conoces sus miradas,
excavas en sus ojos,
y ves la realidad,
pues conoces algo simple para ti,
aquí, tan complejo.

Y así tus caminos serán de elecciones,

acogerás las consecuencias

en cada tiempo en que vivas.

En mi memoria,

esa que a veces tergiverso para esperanzarme
existirás así.

Y recuerda,

no eres tú el encerrado,

soy yo.